Cacto

La canción está impregnada de un insistente recordatorio de que la vida no es solo un camino salpicado de momentos felices. Es una batalla llena de pérdidas y victorias, en la que es importante aprender a aceptar los errores y extraer lecciones de ellos. Es como una dosis de motivación para la mañana después de una noche de insomnio, que nos recuerda que cada paso es importante, incluso si el camino es espinoso. Las palabras sobre ser honesto contigo mismo, respetar a los demás y no tener miedo al cambio suenan como mantras clave. No son solo odas a la vida, sino un recordatorio de que las cosas más importantes a menudo no se ven a simple vista y requieren esfuerzo para alcanzarlas. En medio de todas las dificultades, también hay momentos luminosos: la fe, el coraje y la determinación de seguir adelante, incluso si lo que nos espera es un desierto.